
Si bien es cierto que sólo un médico gastroenterólogo, apoyado por exámenes clínicos, puede determinar la gravedad, las causas y la ubicación exacta de una úlcera gástrica, no es menos cierto que la naturaleza nos ha proporcionado una potente ayuda complementaria. Me refiero al jugo concentrado del repollo (o col) que contiene componentes como la metilmetionina (también llamada vitamina U) y el gefarnato que favorece las cicatrizaciones estomacales y calman los dolores, además de neutralizar la acidez.
El jugo del repollo debe ser el resultado de la perfecta licuación de las hojas y tallo de esta planta; debe colarse muy bien y tomarse (un vasito) una hora antes del almuerzo. No puede llevar restos de fibras ya que éstas podrían causar flatulencias e hinchazón abdominal especialmente en personas afectadas de ulcera . Su sabor no es precisamente muy agradable, pero los resultados son sorprendentes y en un mes la reducción de la úlcera puede ser total.
Recuerde hacerse (paralelamente) ver por un gastroenterólogo.